Debería de ser al revés.

Se debería empezar muriendo y así ese trauma está superado. Luego te despiertas en una residencia mejorando día a día. Después te echan de la residencia porque estás bien y lo primero que haces es cobrar tu pensión. Luego en tu primer día de trabajo te dan un reloj de oro. Trabajas cuarenta años hasta que seas bastante joven como para disfrutar del retiro de la vida laboral. Entonces vas de fiesta en fiesta, te preparas para empezar a estudiar. Luego empiezas el cole, jugando con tus amigas, sin ningún tipo de obligación, hasta que seas bebé. Y los últimos nueve meses te los pasas flotando tranquilo. Con calefacción, comida gratis, etc.. Y al final abandonas este mundo en un orgasmo.